viernes, 14 de junio de 2013

Capítulo 22: Reencuentros (pt. 1)

¡Hola! Aplausos no, pero después de casi DOS MESES consigo tener esta primera parte. ¿La entenderéis bien? Preguntad lo que no sepáis, y lo de siempre, gracias por vuestro apoyo y comentadme vuestras opiniones para tratar de mejorar un poco más cada vez :).

 Kathleen estaba a punto de hiperventilar, el pulso acelerándose a cien por hora en todas las venas de su cuerpo. Podía sentir el pánico invadiéndola; pero tenía que mantener la calma, al menos, por Jay y Sissie.
 Un agudo pinchazo en la zona izquierda de su abdomen, y la sensación de líquido corriendo hacia abajo la inundaban; se habría caído de rodillas de no ser porque quería mantener la frialdad. Sin embargo, ¿también a ella la habían acuchillado? No lo recordaba; el dolor era demasiado intenso que no le permitía pensar con la suficiente claridad.
 -Por favor, termina rápido- susurró antes de que sus fuerzas la abandonaran, dejando de oír algo más que no fueran los gritos de Sissie de fondo. Entonces, oscuridad.
 La sombra se hizo persona con rapidez, y tomó el cuerpo de Kath entre sus brazos.
 -Estúpida chiquilla- masculló-. ¿Qué es eso tan terrible que he hecho? Sólo golpeé a tu chico porque no conseguiría tomarlo si estaba consciente.
 -Los has matado a los dos-le recriminó Sissie; mientras las lágrimas surcaban sus rosadas mejillas.
 -Calla, rubia de bote.
 -Es rubio natural- objetó. Sólo al momento se dio cuenta de cuán estúpida resultaba una discusión sobre la autenticidad de su color de pelo en mitad de todo aquel caos.
 -Sí, ya, y Gracie es mi auténtico nombre.
 Grace terminó de colocar la figura inconsciente de Kath contra la pared que se hallaba al final del desván, cerca de la ventana. Tomó unas esposas y la sujetó a una silla. Después, se acercó hasta Jay y repitió la misma operación, con algo más de esfuerzo.
 -Vaya, el chico es un peso duro. Suerte que está dormido.
 -¿Dormido? ¡Lo has matado!