Peeeeeeeeeeerdonadme. Ayer me quedé sin Internet y no conseguí por ningún medio de poder publicar algo. No me entretengo, que a las diez menos cuarto me voy. Pasadlo bien, disfrutad del verano (y de mi capítulo jeje) y nos vemos el día 30, que será cuando intente subir el nuevo capi. Un besazo y gracias a todos los que me leáis :)
Abby terminó su frase y se inclinó sobre Jay. Lo besó.
Kath trató de esbozar una sonrisa.
-Yo no… Esto, que él y yo… No somos nada.
-Ya procuraré yo de que sea cierto- y se volvió a inclinar para besarlo.
Kathleen volvió a intentar mostrar una sonrisa en su rostro, pero esta se
vio empañada por las lágrimas. Salió del restaurante, viendo a lo lejos cómo se
acercaban las primeras nubes que indicaban que volvería a llover por su culpa.
Jay apartó a Abby de su rostro.
-¡¿CÓMO TE LO TENGO QUE DECIR, ABBY?! ¡QUE NO QUIERO NADA CONTIGO!
Al tiempo que decía esto, la cafetera de detrás de la barra explotaba,
supurando un par de litros de café hirviendo. Aquello, para quien lo supiera,
indicaba que Jay estaba al borde de un ataque de ira.
-Yo… Es que… Pensé que te gustaba…
-¿Quién, tú? No, a ver, cómo decírtelo- resopló- me gusta ella. Kathleen
Gray. Y nadie más, ¿vale?
-Jay, pero…
-Ni peros ni nada. Ya lo sabes. Lo siento mucho si lo has malinterpretado
alguna vez. Mejor que te vayas y no me hables más.
Abby se marchó, con el rabo entre las piernas maldiciendo a Kathleen Gray y
Jay Dennison con todas sus fuerzas.
-Quédese el cambio- le dijo Jay al camarero al tiempo que le pagaba. Se
marchó también.
Se sentía cansado y deprimido. Se sentó en el autobús en la última fila,
solo. Trató de evitar la mirada de Abby y encontrar la de Kath, pero esta
última solo se dignaba a oír a Vanessa hablarle del grado en Bioquímica que
pensaba cursar en Oxford dentro de dos años. De acuerdo, Kathleen y Abby lo
odiaban, aunque de la última le importaba bien poco. Si hubiese reunido el
valor para haberle dicho claramente a Kath que era ella quien le gustaba…
El autobús paró y se bajaron. Volvió a intentar que su mirada y la de
Kathleen se cruzaran, pero volvió a fallar en el intento. Ella iba enfrascada
en leer algo que había en la pantalla de su móvil.
¿Cómo llevas el finde? :)
Me he acordado de ti porque he encontrado una pulsera azul noche (tu color
favorito, ya me lo he aprendido, eh) para los capricornio, como tú. Me he
tomado la libertad de regalártela jaja. Sinceramente, es que paso más tiempo de
tienda en tienda que en casa de mis abuelos. ¿Sabías el rollo que es oír
veinticuatro horas a un hombre hablar sobre prótesis dentales y comida sin sal?
La próxima vez te prometo que te vienes conmigo, ¿eh? Un beso y disfruta por
mí, fea. Sissie ^^
Kathleen leyó apesadumbrada el mensaje y contestó:
Mal, todo mal fea. Cuando
vuelva te contaré (problemas del ♥). Gracias por la pulse, yo te he comprado unos guantes
grises en la ciudad. Espero que te gusten. Ya hablamos. Un beso loca (K) Kath
:D
-Kathleen…
-No tengo ganas de escuchar tus excusas, Jay- respondió con un tono más
hueco del que le gustaría, sin volverse siquiera.
-Pero es que lo que ha pasado…
-¿El qué, lo que ha pasado, qué?- se giró y estalló con lágrimas en los
ojos- ¿Me lo vas a negar? Si te gusta Abby, es tu problema, pero lo que de
verdad me duele es que me mientas así.
-Kathleen, a ver, yo, esto, cómo decirlo… Abby no me gusta. No sé por qué
hace eso. La que me gusta…
-No me tienes que dar explicaciones. Recuerda, tú y yo no somos nada, ni lo
seremos jamás.
Kathleen le volvió la cara y se marchó.
-La que me gusta eres tú- dijo Jay en un susurro apenas perceptible. Se
sentía hundido y gris, al igual que el día.
Jay se paró. Tenía un recuerdo.
Vio a un joven hombre y una joven mujer, en una habitación de hospital. La
mujer reía y decía “¿Dónde está la bebé más bonita del mundo?”. El hombre,
feliz, sonreía. “Esa eres tú, ojitos
verdes”. De repente veía a la mujer coger en brazos a un bebé de pocos días,
quizás horas, gordito y de mejillas sonrosadas, con el pelo un poco rizado y
claro, y los ojos verdes.
La visión cesó. Jay sintió una tremenda paz interior. Aquella bebé de ojos
verde aguamarina y piel aterciopelada no podía ser otra que Kathleen. Entonces,
aquellos debían ser sus padres biológicos. ¿Tendría que contárselo? Quizás
fuera feliz al saber que sus padres eran dos personas hermosas y enamoradas,
que la querían. No, claro, por algún motivo que en la visión él no veía, ellos
desaparecieron y la dejaron sola. Seguramente si le contaba aquello, la
quemaría tanto por dentro como a él si le mentaban a sus padres biológicos.
-○-
-¿Qué quería? Porque me ha mandado llamar, verdad.
-Siéntate- refunfuñó un hombre de mediana edad a una chica adolescente-
¿Qué ha pasado? Llueve y hace a la vez un calor sofocante. Son sus poderes, pero no recuerdo si pasaba eso
cuando estaban tristes o felices.
-Creo que era cuando estaban tristes. O, por lo menos, ella debe estarlo,
por lo que les he hecho en la ciudad.
-¿Qué? ¿Qué estaban juntos en la ciudad?
-Sí… Los encontré tomando un chocolate y riéndose en una cafetería, como
dos tortolitos. Quien no los conociera, hubiera jugado su cuello a que eran una
pareja.
-¡NO! ¡Mierda! Eres una completa inepta. ¿Y si se han rozado, qué, eh?
-Lo dudo mucho. Estaban bien separados el uno del otro. Tenían los pies
pegados a la silla. Además, yo me encargué de fastidiarles el momento.
-¿Segura?
-Sí; creo que la ojos de moco se
quedará quietecita por una temporada. Pero el rubiales es harina de otro
costal. El muy pesado seguro que seguirá insistiendo.
-Me alegra ver que al menos vas haciendo algo bien, so inútil. Por cierto,
¿cómo que harina de otro costal?
-Pues que está obsesionado con la rubia flacucha esa.
-Mierda otra vez.
-¿Qué ocurre?
-Creo que eso no se había dado nunca. Los dos idiotas de Gill y Cedric
estaban loquitos el uno por el otro pero hasta que no juntaron sus manos por
accidente, nunca habían hablado ni nada. Temo que estos dos tontainas se
enamoren de verdad. Se volverían demasiado peligrosos. Ahora, más que nunca,
tienes que separarlos. ¿O acaso no quieres la inmortalidad?
-Sí, claro, pero es que yo…
-¡Pero es que nada! ¡Eres una total idiota! Sin embargo, eres lo único que
nos queda para mantener a la señorita ojos
de moco separada del rompecorazones.
-Está bien, pero…
-¡Que te dejes de peros, niña!
-Pero, ¿me quiere escuchar?
-No. Sube y me vigilas a la rubia. Shhht, venga.
La chica subió las escaleras aún refunfuñando. Si el hombre la hubiera
escuchado, le habría podido decir lo que el otro día descubrió debajo de la
cama de la chica, que aquella tarde había desaparecido.
JAJAJAJA Que le den bien por saco a Abby xD xD Jay&Kathleen 4ever leñe!!! Me encanta,te echaré de menos,y a tus capítulos también!Un besazo enorme!!
ResponderEliminarJajaajaja tranquila, en el próximo será otra cosa... ^^ Oh, gracias, yo también echaré de menos los tuyos, espero que tú también lo estés pasando genial y que puedas leer el capítulo 9º pronto :D
EliminarUN BESAZO ENORME ;D
Hola Julia!
ResponderEliminarHace tiempo había encontrado tu blog y le había echado un vistazo al los primeros capítulos, pero no había tenido tiempo de leer el resto, hace poco lo retome y he leído hasta el capitulo 8 quería decirte que es una historia fantástica! me gusta mucho lo que has creado, te has ganado a una nueva seguidora!
Por otro lado me gustaría que te pasaras por mi blog http://amoresenpaginas.blogspot.com/ y me dejaras tu opinión. Y me preguntaba también si me podías afiliar.
Bueno me despido porque te estoy dejando un testamento como comentario. Ya veras que sabrás mas sobre mi cuando comente tus otros capítulos.
Saludos!
¡Hola! :3 Muchísimas gracias, me alegra no sabes cuánto que te guste la historia, espero que te gusten también los demás capítulos.
EliminarJAJAJAAAJAJAJA NO TE PREOCUPES xD Ahora me paso y lo miro, seguro que es genial. Ah, y también te afiliaré :))
¡Un beso!
muchas! gracias
Eliminarya e leído los capítulos hasta el 11!
cuanto misterio, me dejas intrigada con cada capitulo. Y lo peor es que lo leo de noche, entonces me dicen que apague la luz, y ahí quedo yo, con las ganas de saber que pasa!
Saludos!
DIOS MÍO, me encanta que opines eso de mi historia, enserio :') Próximamente publicaré, trataré de mantener algo de misterio pero no es nada fácil. ¡Un besazo enorme!
ResponderEliminartambién el chico tiene visiones?? así que Abby quiere la inmortalidad... pero aun así, pobre!! que tenía la chica debajo de la cama?? la foto??
ResponderEliminarpsd: te acabo de nominar en mi blog a un juego literario:
Eliminarhttp://magicangy.blogspot.com.es/2013/04/juego-literario-de-las-frases.html
si no te gusta, no tienes porque hacerlo, no hay problema con ello ^^
un besoo
Sí, es un poder de ambos; una de sus muchas peculiaridades :)
EliminarJajaja sí, era la fotografía (:
¡Claro! Ahora mismo no podrá ser porque voy a publicar el capítulo 19, pero la semana que viene, a más tardar, la hago. Es un juego muy simpático. ¡Besos! :)